viernes, 8 de abril de 2011

CUCHARADITAS

DESPUÉS de hacer tuyos los versos
que han escrito mis noches más tristes,
de pintarte en los labios los besos
de los hombres que nunca tuviste.

Después de lanzar contra el suelo
mis sueños a tus noches atados,
de robarme el trocito de cielo
que yo ya te había regalado.

Hoy te vuelvo a entregar mis “te quiero”,
a decirte que no estarás sola,
que mi Amor es un barco velero
que se deja arrastrar por tus olas
y naufraga de Amor...
de Amor.

Después de endulzar mis pupilas
con los ojos que encuentran miradas
de empacharme con la clorofila
de tus hojas todas las mañanas.

Después de calarme los huesos
con el néctar de tus Primaveras
de beberme todos los excesos
del Amor que vive en tus caderas.

No te creas que te he olvidado
porque no hablo de ti princesita
pues mi Amor es un duende encantado
con los besos que hay en tu boquita.

Que te guardo un sitito a mi lado
para cantarte canciones y a oscuras
trasnochar encima de los tejados
y dormirnos mirando la luna
y soñarnos mi Amor...
mi Amor.

Hoy te vuelvo a entregar mis “te quiero”,
a decirte que no estarás sola,
que mi Amor es un barco velero
que se deja arrastrar por tus olas
y naufraga de Amor...
de Amor.


Yo que he tenido la mala fortuna
de ser la semilla en mitad del camino
son tantas veces las que me imagino
como la flor que de Amor te perfuma.

Cucharaditas de azúcar, canela y ron
para endulzar los latidos del corazón.

Y no me importa tener que contarte
que por ti tengo dormidos los sueños
que es el Amor la droga de diseño
que no me deja poder olvidarte.

Cucharaditas de azúcar, canela y ron
para endulzar los latidos del corazón.

Y aunque tu boca se empape de olvido
cuando tus labios pronuncian mi nombre
sé que soy yo de todos esos hombres
que has olvidado al que más le has querido.

Cucharaditas de azúcar, canela y ron
para endulzar los latidos del corazón.

Guarda mi amor tus mejores posturas
para el ladrón que te robe un suspiro
ya no se riegan mis flores a tiros
ni se me quedan los sueños a oscuras.

Cucharaditas de azúcar, canela y ron
para endulzar los latidos del corazón.

Cucharaditas de azúcar, canela y ron
para endulzar los latidos del corazón.


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